El Diablo


(Obra: S. Ana, la Virgen y el Niño con el cordero)

 

 

 

 

Esta nueva imagen, ocultada en la parte anterior del cordero, tiene semejanzas vagamente humanas, monstruosas, y en la cabeza tiene dos orejas peludas en forma de cuernos. Aquello que es el miembro anterior del cordero, se convierte en un "muslo" que el monstruo retratado está comiendo. Vista la profanación de la escena (en el cuadro el cordero es el compañero de juego del Niño Jesús) y las facciones del monstruo, llamaría a este retrato "el diablo". He encontrado posteriormente en el Tratado de la Pintura, las palabras de Leonardo da Vinci que he antepuesto a la premisa en el esquema definitivo de mi Libro;  Leonardo afirma que entre las cosas que se pueden encontrar en las "manchas de los muros", y de los cuales se pueden traer "invenciones", hay también: " ....... cosas monstruosas, como diablos o cosas similares, .......".
Para observarlo es necesario girar el cuadro 90° en sentido antihorario. La zona principal del rostro se encuentra en aquella parte del cordero delimitada en alto del brazo derecho y del pie izquierdo del niño. La parte baja del rostro, debe ser en cambio buscada en las líneas y sombras presentes en la pierna derecha de Jesús. La pata derecha del cordero, es vista como si fuese "removida" del mismo y "comida" por el monstruo.

A la izquierda podemos notar la imagen "original"; en el parte interna del óvalo, se puede observar "el diablo". Para observarlo, es necesario "ir más allá de las formas"; Leonardo, en la zona central de la imagen, ha usado un color apenas más oscuro del color de base, para realizar con esto, las líneas esenciales y la sombra que caracterizan el rostro del "diablo".

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La imagen  a la izquierda, es "el original" acercado. La segunda ha sido obtenida "limpiando" el cuadro "digitalmente" poniendo en evidencia las líneas que caracterizan la imagen ocultada.

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Como las otras imágenes ocultadas, ésta la he descubierto observando la obra visualmente, "atraído" por el ojo derecho, también monstruoso, de la misma; y sólo posteriormente, analizando la imagen al PC, he podido notar los particulares que caracterizan a este inédito. El ojo que se nota es, como en los otros casos, su ojo derecho. "Limpiando" el cuadro, he podido descubrir después el otro; se observa además la presencia de numerosos pelos en las orejas, y dentro de la boca, los dientes son bien evidentes. He notado además, en la cabeza del monstruo, la presencia de numerosos rasgos, que unidos, forman algunas letras. Aún cuando, están muy cerca entre si, más bien diría casi en secuencia, sin embargo, estas letras no parecen formar ninguna palabra completa. Por lo menos, este es el resultado derivado del estudio de las imágenes en mi poder. Para un mejor resultado, sería necesario estudiar en el PC, una imagen digitalizada tomada directamente de la zona interesada, y por lo tanto más cercana, del original del Louvre.

 

Las Maravillosas Invenciones:

 

 

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(Las imàgenes publicadas en este sitio, relacionadas con las elaboraciones gràficas de la Obra S. Ana, son de exclusiva propiedad del Autor. Es posible utilizarlas previa autorizaciòn del mismo).

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